Mejor lectura del año: el diario de Ana Frank
diciembre 15, 2019
Sinopsis (editorial publimexi)
El 12 de junio de 1942 Ana Frank recibe como regalo de cumpleaños un diario que se convierte en su mejor amigo, un documento desgarrador que refleja con detalle la lucha de una colectividad humana contra la persecución implacable y el odio racial, encarnados en los agentes de la S.S. y la Gestapo.
El diario de Ana se inicia cuando la familia penetra en el refugio del 'Anexo Secreto' en Holanda; pues debido a que es judía tiene que esconderse junto a su familia y algunas personas más. Día a día vamos conociendo todas las preocupaciones y sentimientos a través de una niña que madura precipitadamente debido a la cruel experiencia a la que se enfrenta.
El diario de Ana Frank es, sin duda, una de las obras más famosas del pasado siglo. Ana Frank, apenas comenzada su adolescencia, se ve obligada a vivir recluida junto a otras siete personas por miedo a ser detenidos por las autoridades debido a su condición de judíos. El hecho de que sea una fuente primaria que transmite al lector el testimonio de alguien que vivió uno de los acontecimientos más importantes de la Historia en sus propias carnes ya concede a la obra, de por sí, una importancia considerable. Pero es que, además, Ana Frank contaba con una sensibilidad y una pluma especiales a la hora de escribir.
Consideraba a su diario su amiga (el papel es más paciente que el hombre, llegó a escribir) y, como a tal, le escribía cartas refiriéndose a ella como Kitty, las cuales dan forma a la obra que conocemos. En ella conviven multitud de temas y emociones, mezclando la cotidaneidad de la vida de una adolescente con los aspectos más peculiares de su convivencia. Las disputas familiares, la escasez creciente de comida, el tedio del encierro y las noticias radiofónicas sobre la guerra se entretejen con el despertar del amor y la sensualidad, la nostalgia, el anhelo e, incluso, la culpabilidad, creando un torbellino de emociones ante el que es imposible permanecer impasible.
'No he escrito desde hace unos días porque quería ante todo reflexionar sobre lo que significa un diario, no sólo porque es la primera vez que tengo uno, sino porque siento que transcurrido un tiempo nadie, ni aun yo, se interesará por la confidencias de una muchacha de trece años'.
Así, con una de mis citas favoritas debido a la ironía en que se ha convertido, empezaba Ana una de las primeras entradas de su diario. Era el 20 de junio de 1942, antes de que comenzara el encierro que se prolongaría hasta el 4 de agosto de 1944. En marzo de 1945 Ana moría en el campo de concentración de Bergen-Belsen, apenas dos meses antes de la liberación de Holanda. Ana Frank confiesa en su diario su deseo de ser escritora y a mí me hace muy feliz que, gracias a su padre, que rescató su diario, su nombre haya trascendido como nunca imaginó que lo haría.
0 comentarios